Los emojis deseados


La llegada de los smartphones revolucionó al mundo por completo. La forma de comunicarnos sufrió un cambio abrupto, quizá más estruendoso que con la llegada del teléfono.




Si antes teníamos que esperar a que cualquier miembro de la familia desocupara el teléfono o teníamos que estar formados en las casetas telefónicas esperando turno para hacer esa ansiada llamada, ahora la situación es completamente diferente.




Más de la mitad de la población mundial tiene un teléfono celular. Las ganancias para las compañías son millonarias por día, ya no pensemos por mes ni por año. Su uso se ha vuelto una cuestión cotidiana, con el plus de que no hay que esperar a nadie para llamar.




El acercamiento entre las personas es estrecho, sin ahondar en el tema de mejor ver a la persona en vivo y a todo color para interactuar. Y no sólo hay comunicación verbal, sino que la nueva telefonía trajo la comunicación digital, en otras palabras, los mensajes de texto.




El texting o textear se ha convertido en una tendencia que todos aquellos que poseen una aplicación de mensajería instantánea realizan a diestra y siniestra. Las escenas son muy comunes en cualquier parte que uno pueda imaginar: en la calle, el transporte, el trabajo, la escuela y, lo peor, en el auto.




Los mensajes de texto por el Messenger de Facebook, WhatsApp, Twitter o Telegram son la compilación de una idea plasmada en pocas palabras, o por lo menos esa es la intención porque hay quienes escriben versículos, lo cual pone a debate si no sería mejor que hiciera una llamada y en menos de un minuto diría lo mismo.




Hay quienes se han vuelto expertos en el fino arte de textear que ocupan símbolos e imágenes en lugar de palabras para comunicarse, lo cual le otorga una cualidad más a los mensajes.




Y, una vez que integraron los famosos emojis a los teclados, las palabras dejaron de ser el elemento importante de la comunicación virtual. Ahora las pantallas se llenan de esas caritas amarillas que tienen gestos de diversos estados de ánimo, aunado a otra serie de iconos. Y ahora con la actualización de WhatsApp donde se puede elegir la raza y preferencia sexual, se ha enriquecido.




Tal parece que los emojis acaparan la atención de los usuarios, sin embargo, siempre existirá quien desee que haya más iconos para ilustrar sus mensajes. Por ejemplo, una colección de músicos. A muchos nos gustaría y los utilizaríamos con harto agrado.




Si alguna firma multimedia o compañía de aplicaciones voltea la mirada hacia Brasil, ahí podrá encontrar al director de arte Bruno Leo Ribeiro. La intención es que lo recluten cuanto antes porque tiene desarrollada una idea de emojis con características puramente musicales.




Ribeiro ha diseñado una colección llamada Music Emojis inspirada en personajes famosos de la música. Se imaginan poder enviar un icono de Amy Winehouse, David Bowie, AC/DC, Metallica, los Red Hot Chili Peppers, incluso a todos los integrantes enmascarados de Slipknot.




Bruno Leo Ribeiro lo ha logrado, así que si quieren ver más de su trabajo, sólo den click en su nombre.

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