Todos tienen a alguien en la cabeza
Corto, largo, negro, rubio, castaño,
ondulado, chino, lacio así de diverso es
el tipo de cabello que le crece al ser humano, sin contar que con la edad y
el paso del tiempo la cabellera va
cambiando, se va perdiendo o la vamos modificando dependiendo lo que está
en tendencia o como dicen "a la moda lo que a cada quien le acomoda".
El cabello
no existe sólo para decorar la
cabeza y enmarcar el rostro. Es una protección que nos mantiene abrigados, preservando el calor (perdemos un 90% del calor del cuerpo a través de la
cabeza). Además de que protege al cuero
cabelludo del sol y el frío y de algunas posibles lesiones, gracias a que nos sirve de amortiguador.
El pelo es algo que constantemente modificamos, aquellos que tienen una
cabellera oscura prefieren aclararla, los que tienen chinos lo alisan o
viceversa. El cabello tiene la cualidad de ser modificable a gusto de cada
persona. Y aunque es una parte importante de nuestro cuerpo, en
ocasiones el debilitamiento y la pérdida
del mismo es inevitable. Claro,
también hay quienes, aunque gocen de una melena envidiable, prefieren
deshacerse de ella.
En otros casos como los adolescentes que están
en la etapa de la secundaria es requisito, al parecer indispensable, que tengan
el cabello corto, si no puede ser
objeto de una sanción –por lo menos eso
es lo que recordamos de nuestros tiempos-, por lo que ahí no hay de otra y el
corte en tendencia es el casquete corto. Incluso los jóvenes que acuden con su
peluquero de confianza ya no tienen que especificar cómo lo quieren, los
expertos ya saben lo que tienen que hacer y qué número de hoja de la rasuradora
debe usar.
Elegir un corte de cabello, aunque puede tratarse
de un asunto banal, es una decisión
hasta cierto punto importante, pues
también define nuestra personalidad, y queramos o no, también se debe
considerar el medio en el que nos desenvolvemos. Ya les contamos del caso de
los estudiantes de secundaria, pero qué hay de los oficinistas, en el caso de
la gente que trabaja en un medio creativo: agencias de publicidad, de diseño, televisión,
cine, tiene más oportunidad de elegir lo que le guste.
Para aquellos
que no tienen restricciones por cuestiones laborales o escolares, y que
además son extrovertidos, les presentamos a un estilista que es todo un artista, Rob Ferrel, fundador de la
peluquería Rob The Original, ubicada en San Antonio, Texas.
Rob es muy hábil utilizando las tijeras y la cortadora de cabello. Un cliente
puede llegar y pedir que le pase la del dos, lo que significa que quiere un
corte muy pegado a la cabeza en los lados y la parte de atrás, pero no sólo eso
también pide traer en la cabeza a su jugador de futbol favorito. Rob sin
pensarlo pone manos a la obra corta,
rebaja, rasura, traza, dibuja, delinea y ¡sorpresa! Messi aparece como
tatuado en la cabeza del fan.
El profesional del cabello le da forma a cualquier personaje
solicitado: futbolistas, basquetbolistas,
personajes de cómics, caricaturas, de serie de televisión, del cine, cualquier
imagen de la cultura popular puede ser recreada en la cabeza de quien así
lo desee.
Ni el joven manos de tijera hace diseños tan
detallistas como Rob Ferrel. Si les late cómo corta el
cabello y quieren conocer más cortes sólo den click en su nombre y apellido.
¡Oh! Es genial con esa habilidad en las manos. Felicidades Indie Emergente.
ResponderEliminarsos un genio la verdad como colega me quitó el sombrero
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