Trabajos muy "sácalepunta"

Una de las herramientas de cualquier estudiante, desde el kínder hasta la secundaria, que permite que la enseñanza se quede grabada, es el lápiz. Los lápices de madera –de cualquier color- nos han acompañado a través del desarrollo intelectual, haciendo planas y planas de palabras mal escritas, bolitas y palitos para mejorar la caligrafía y en un sinfín de actividades.

Un lápiz de madera siempre debe ir acompañado del sacapuntas. Su inseparable y fiel amigo que le ayudará a tener la punta que mejor pinte. Hay algunos que presionan tanto el lápiz contra el papel que la terminan rompiendo.

Sacarle punta al lápiz no es tan sencillo como parece, porque si te pasas, la cortas y hay que seguirle dando vueltas, lo malo es que se acaba más rápido. Los residuos siempre son desechados, tirados a la basura y ahí quedan, perdidos para siempre.

La ilustradora catalana Marta Altés rescata esta “basura” para darle una utilidad artística. Si recuerdan, estos sobrantes siempre salen en forma de abánico, por ello, aprovechando esto, se lanza a crear ilustraciones como la de un león, un punk, unas bailarinas de flamenco y de ballet, una mariposa, una flor, un surfista y un torero. El trabajo lo llama Playing with Pencil Shavings.

El trabajo tiene detrás una amplia imaginación para retutilizar lo que nadie se imaginaría que se pudiera usar, mucho menos que se creará arte.