Collages de cómics... faciales



El mundo de las historietas es enorme, cada día crece a pasos agigantados; los hay de culto y lúdicos. La mayoría se comprende de superhéroes, son los más buscados, los que más seguidores tienen y los que crean comunidades alrededor del mundo.





Los hay con alto grado de violencia y los que son aptos para todo tipo de público. Es innegable que los más reconocidos son El Hombre Araña, Superman, Batman, La Mujer Maravilla, El Capitán América, Thor, Iron Man, Hulk y todos aquellos que forman parte de DC Comics y Marvel.





En estos terrenos hay un tema controversial: la falta de personajes femeninos. Como en muchos ámbitos, la ausencia de las mujeres, en este caso, como defensoras de la justicia es evidente. La más reconocida es La Mujer Maravilla -que hasta serie de televisión tuvo-, y por ahí se filmó una película sobre Elektra.





Una de las personas que le gusta tener modelos femeninas para destacar su belleza y la fuerza de los gestos que se pueden transformar en acciones de fortaleza, es la artista canadiense Sandra Chevrier, quien cubre los rostros de sus mujeres con las diversas páginas de los cómics de superheróes para crear la serie Comic Book Portraits.




La idea le surgió gracias a la “mala calidad de los muebles de IKEA”. Estas pinturas nacieron por culpa de un accidente, tal como se han dado muchos descubrimientos a lo largo de la historia.





Resulta que Chevrier tenía un armario de la marca IKEA donde guardaba todos sus botes de pintura que utiliza para realizar sus trabajos. Comenzaba a trabajar en un proyecto nuevo que estuviera apegado a la modernidad. Así que para recubrirlo, compró bastantes cómics antiguos -tal como hacen algunas personas con el periódico para que no se manche el piso-, y en ese momento se quebró el mueble de IKEA regando la pintura sobre las historietas.





Lo que provocó el contratiempo, fue una mirada diferente ante el resultado de verter pintura sobre las historietas, porque pensó que los rostros de sus modelos femeninas podrían estar cubiertas de pedazos de hojas de cómics donde aparecieran los superhéroes.





El resultado final ya es un boom en todo el mundo, por la grandeza con la que distribuye a los héroes dentro de los planos que otorga la superficie facial. Su obra se destaca porque deja despejada la boca, y en ocasiones los ojos, exaltando la belleza artística de cada uno de sus retratos.




Sandra Chevrier no es fanática de los cómics, sin embargo, se ha dado cuenta que su lado estético es fino, dinámico y los movimientos que plasman los personajes le aportaron dinamismo a su obra.





Comic Book Portraits tiene un mensaje social: “vivimos en una sociedad en la que tenemos que cumplir, satisfacer y superar, ¡ser superhéroes! La sociedad nos está pidiendo ser superhéroes. Decidí usar la historia de La Muerte de Superman y Superman, el Hombre de Acero, donde se percibe que incluso los superhéroes tienen puntos débiles y fracasan”.




Comentarios

  1. Si fuera tan "fanatica" de los comics no los pone bajo su mueble viejo para que no se manche el suelo...

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    1. Ahi dice que no es fanatica de los comics , se dio cuenta despues de su accidente que podia aportrles estetica para utilizarlos en su ovr de ahi , creo ya lo que es la obra con su discurso . En mi opinion no le quita el sentido ni la importancia a los conics al cobtrario hizo arte apartir de ello me gusta su obra :)

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