Belleza ausente


Para ustedes, ¿cuál es la belleza de una persona?



Acaso es aquella que tiene una cara linda, un cuerpo perfecto, unos sentimientos inmensos, los fashionistas, los hipsters, los que tienen harto dinero.


La belleza como tal es subjetiva y relativa. Para algunas algunas mujeres Kurt Cobain es el símbolo del hombre atractivo, mientras que para otras es un tipo desaliñado y mugroso.



La belleza vista desde los ojos femeninos se vuelve aún más subjetiva. Una gran mayoría tiene fuertes contradicciones para aceptar que la mujer de enfrente tiene sus encantos que la distinguen. Las mujeres se dan con todo, aunque digan que no es cierto.


Los hombres tienen menos problemas con eso, pero no por ello gustan de denigrar cuando el otro encanta más a las féminas, de tal manera que llegan a justificar que su físico es mejor al no ser perfecto pues viven felices comiendo y haciendo lo que gusten.



Y como estos pequeños puntos, hay cientos con los cuales se puede entrar en una discusión y donde pocos estarán de acuerdo. Definir lo que más llama la atención es complicado, por eso se prefiere enarbolar a los personajes públicos del mundo de la farándula, ellos se convierten en el modelo perfecto a seguir, tanto en el parecido como en la búsqueda de pareja.


Las selfies se han convertido en un instrumento visual de las redes sociales para que cada quien juzgue si sus amigos son galanes o de plano están feos. Estos autorretratos tienen la capacidad de mostrarnos las imperfecciones y cualidades de alguien gracias a su cercanía con la lente.



El mundo digital está lleno de selfies y el artista italiano Giuseppe Pepe se encuentra aburrido de que así sea, por ello crea una colección de fotografías que es imposible que de alguna manera sean selfies.


Gracias a su experiencia en el mundo de la edición fotográfica, decidió crear un concepto muy cercano al “anti-selfie” que consta de eliminar la cabeza de las personas que congela en sus instantáneas.



“Removí la cabeza porque no me gusta la belleza perfecta", es una sentencia que revela cómo cada personaje no pierde la interacción con los demás elementos a pesar de no tener un objetivo selfico; imágenes que crean ruido visual, pero que siguen siendo encantadoras por el entorno pop que manejan.


Para saber más de Giuseppe Pepe, den click en su nombre.

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